El asalto de los piratas israelís a la flotilla humanitaria está trayendo consecuencias negativas para Israel. El mundo comienza a darse cuenta de quiénes son los verdaderos terroristas, y por ello, la campaña de boicot, sanciones y desinversiones va ganando adeptos a diario.
Las mercancías israelís cada vez encuentran más dificultades para entrar en los puertos occientales. En las últimas semanas, estibadores y activistas de puertos de todo el mundo se han manifestado pacíficamente, evitando que los bienes producidos gracias a la sangre palestina sean comercializados. Por ejemplo, en el puerto de Oakland, los piquetes impidieron descargar al barco israelí. Los estibadores noruegos han bloqueado todo cargamento israelí durante 2 semanas en señal de protesta. Lo mismo habían hecho sus compatriotas suecos. Y como corolario, el Consejo Internacional de Estibadores, ha condenado el asalto de las fuerzas de ocupación israelís a los barcos humanitarios. A esto se une el llamamiento de la Federación Sindical Mundial a la huelga de 3 días en todos los puertos del mundo contra los productos israelís.
En España, en concreto en Valladolid, la plataforma de solidaridad con Palestina ha pedido que el Ayuntamiento no adjudique la red Wi-Fi a la empresa israelí Ambar Telecomunicaciones. Por su parte, el Ayuntamiento de Siero, en Asturias, anunció recientemente que rompe todo tipo de relaciones con el Estado de Israel mientras no cesen sus políticas genocidas y de ocupación. Y en la Feria de Turismo de Donostia 2010, varios activistas emprendieron acciones pacíficas contra la caseta de Israel. Y los europarlamentarios españoles de Izquierda Unida y Esquerra Republicana han pedido a la Comisión Europea que condene el bloqueo israelí a Gaza.
Aprovecho para recordar que los productos israelís llevan un código de barras que comienza por "729". Recomendamos que peguen este número en un post-it a la nevera, y lo tenga siempre en mente cuando vaya a hacer la compra: 729. Asimismo, quiero recomendar la web www.boicotisrael.net, donde puede encontrarse amplia información sobre cómo llevar a cabo al boicot.
De nuevo, hay que reiterar que la campaña internacional de boicot, sanciones y desinversiones no está en ningún caso movida por impulsos antisemitas. Desde el máximo respeto hacia el pueblo judío, se quieren condenar las políticas de violencia y ocupación de Israel, y en particular las relacionadas con la constante violación de derechos contra el pueblo palestino. Igual sucedió con el boicot al régimen sudafricano del apartheid, sin que nadie tildase a los activistas de anti-caucásicos.
Querido lector, usted no se una, nadie notará su ausencia. Olvídelo, 7, 2 y 9 son tres cifras que pronto se perderán entre los resultados de fútbol del mundial, sin que merezca la pena hacer el esfuerzo de retenerlos. 729...72..9... Feliz café israelí.
Gracias por la información.
ResponderEliminarIdem.
ResponderEliminarQuerido Daniel,si después de todo lo que has escrito aún queda algún cretino que está encantado de "confundir" antisionismo con antisemitismo ES PROBLEMA SUYO. Todos los que a parte de juntar letras sabemos leér SABEMOS que lo perverso es el estado israelí,no"los judíos";que los paragüas sirven para evitar mojarte aunque puedas sacar ojos con ellos,que los martillos sirven para fijar cosas aunque puedas romper cráneos con ellos,que los bolígrafos sirven para escribir aunque puedas apuñalar con ellos...En fin;los judíos son TAN CULPABLES como los argentinos,los españoles,los guatemaltecos,,los bielorrusos,los laosianos y los alemanes. Los culpables de tánta iniquidad son LOS SIONISTAS sean de donde sean y vivan donde vivan.
P.D.:Isaac,¿cómo van tus"medidas urgentes"para cerrar este blog?. Supongo que en tu ferviente lucha contra la libertad de expresión hayas consguido encontrar un tribunal cuyas sdentencias aún no hayan sido burladas por tu estado favorito(aunque dudo seriamente que quede alguno)y hayas conseguido encontrar alguna declaración pro-nazi(sin contar las tuyas,claro)y exhaltadoras de los holocaustos(los que léen este blog en mi ciudad se oponen incluso a la matanza de ballenas). Ya me contarás.
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