miércoles, 30 de diciembre de 2009

2010: la paz en la encrucijada

Acompáñeme un momento con su imaginación: de repente, miles de españoles deciden asentarse en distintas zonas de Portugal, por ejemplo, en las desembocaduras de los ríos Duero y Tajo. Estos ciudadanos declaran esos territorios pertenecientes a España, invocando un antiguo Cantar de Gesta, en el que unos caballeros españoles conquistaron la zona. Los campesinos portugueses, indignados ante la repentina e injusta pérdida de sus terrenos más fértiles, deciden tomar las armas para combatir como puedan a los invasores españoles. Ante esta situación, la Comunidad Internacional condena unánimente el terrorismo portugués, y pide al gobierno de Portugal que controle a sus súbditos, para que no desencadenen una guerra atacando a los nacionales de otro estado. El ejército español, con las armas que le regala Estados Unidos y la Unión Europea, se desplaza a la zona para encargarse de la seguridad de los colonos, mientras que el Gobierno español construye un muro en mitad de Portugal para proteger a los españoles...Esta situación no es real, pero tampoco surrealista. En los territorios entre el Mediterráneo y el Jordán está sucediendo algo similar. Desde 1967, el ejército israelí y los colonos han ido añadiendo territorios al Estado de Israel de forma ilegal. Más de 450.000 colonos viven ya en Cisjordania y Jerusalén Este, desafiando las fronteras establecidas por las Naciones Unidas.

Tras un camino de 41 años de crecimiento territorial, hemos llegado al punto en el que hay que elegir uno de los dos senderos que se nos ofrecen y no podremos ya retroceder. Para que Israel pueda seguir siendo un Estado judío y democrático, es necesario que exista un Estado Palestino, y ahora veremos porqué.El Estado de Israel está basado sobre dos principios fundamentales que le dotan de un carácter diferenciado en su latitud: democracia y judaísmo. Si el ejército y los colonos ocuparan todo el territorio de Palestina, 3,5 millones de palestinos quedarían dentro de ese territorio -además de los varios millones de refugiados que no tendrían a dónde volver-. Ante esta situación caben dos posibilidades: la primera es que se les integre en el Estado de Israel con plenos derechos políticos. La consecuencia sería que, dada la alta tasa de natalidad palestina, en poco tiempo los musulmanes de nacionalidad israelí superarían a los judíos, e Israel tendría un presidente palestino y musulmán. La segunda opción es que los palestinos quedaran en una especie de limbo legal como ciudadanos de segunda a los que se animaría para que dejaran el país y por tanto, el Estado dejaría de ser democrático. Como se ve, ninguna de las dos soluciones es viable para Israel.

En cuanto al Estado Palestino, y hé aquí lo novedoso del momento que atravesamos, está dejando de ser realizable. Con el nuevo plan de construcción de asentamientos israelís, que llegarían de forma continuada hasta Jericó, separando Ramallah de Hebrón, Cisjordania quedaría dividida en dos partes, lo que unido a la imposibilidad de contactar con Gaza, haría impracticable la existencia de un estado en esas condiciones. El único desenlace posible sería, de nuevo, un sólo Estado.

A una de las partes en conflicto, Israel, cuya superioridad militar es innegable, no le interesa detener las conquistas, ya que tanto los religiosos como los militares se ven beneficiados por la ocupación. La otra parte, Palestina, no tiene los medios necesarios para plantar cara a Israel y exigir un Estado. En tal situación, sólo la intervención de un tercero más poderoso que Israel puede hacerle ceder. Hasta ahora, ningún presidente de Estados Unidos ha querido actuar en favor del Estado palestino.

Por tanto, la oportunidad que se nos presenta con el nuevo año, es la última, y el tiempo apremia. A Obama le quedan 3 años, a lo sumo 7, durante los cuales Israel tratará de sobrevivir cómo pueda, mediante maniobras de distracción, como la eterna discusión sonre la congelación de los asentamientos. Una alternativa solución podría ser el plan que propuso este verano Javier Solana: tras las elecciones palestinas de 2010, quien salga elegido Presidente, se ha de presentar ante la ONU y pedir la membresía de Palestina. Cuando la propuesta llegue al Consejo de Seguridad, Obama no utilizaría su derecho de veto, y Palestina se convertiría en un Estado miembro de pleno derecho. En este caso, sería más difícil para Israel justificar su intromisión en las fronteras de 1967, y el Consejo de Seguridad podría ordenar el envío de tropas de pacificación a la zona, ya que un Estado miembro estaría ocupando ilegalmente a otro estado miembro.Pero rompamos este castillo en el aire que acabamos de construir y volvamos a la realidad. España, al igual que Estados Unidos, Alemania o Francia, aún no ha reconocido al Estado Palestino. El Presidente Zapatero, en un discurso bastante hipócrita, hablaba hace poco en la cumbre del G-20 de la importancia de que el mundo reconozca al Estado Palestino, cuando ¡su país aún no lo ha hecho!

En conclusión, el año 2010 va a ser decisivo en el devenir de la ocupación israelí. O bien el mundo, con Obama al frente de la mayor potencia mundial y Zapatero liderando la Unión Europea, opta por aceptar en la ONU al Estado palestino, y actúa -no sólo habla- para que se retiren los asentamientos y Palestina tenga plena soberanía dentro de las fronteras del 67, o bien Israel habrá conseguido su propósito de dominar todo el territorio hasta el río Jordán. En este último caso, los palestinos quedarían recluidos en sus aldeas, sin poder circular libremente por el que debería ser su país. Es decir, podemos optar por el compromiso, la determinación y la responsabilidad moral, o por la indiferencia ante el sufrimiento de todo un pueblo.

Querido lector, le deseo que en el nuevo año, los problemas del mundo no se conviertan también en suyos, y pueda usted gozar de buena salud y de abstracción del sufrimiento ajento. Feliz próxima vuelta de la tierra alrededor del sol, y feliz café.

martes, 29 de diciembre de 2009

Navidad en Wall Street....

O mejor dicho, "Hanukah en Wall Street", pues como se puede ver en la foto, este año Wall Street ha decidido colocar dos candelabros judíos en su fachada como adornos navideños. Asimismo, pueden verse decoraciones navideñas de la religión judía por toda la ciudad, puestas por el Ayuntamiento de Nueva York.

Hé aquí una prueba más del trato de favor que reciben los judíos en el mundo occidental. Estados Unidos se las intenta dar de pluralista religioso, cuando la realidad es que se ven cruces y candelabros, pero ni una media luna musulmana. Con esto no queremos decir que nos parezcan mal los adornos navideños con motivos religiosos judíos (nos parecen mal todos los adornos por el gasto innecesario de luz que suponen), sino que la imagen esa que a veces se quiere dar de que los judíos necesitan su Estado porque están mundialmente perseguidos, es radicalmente falsa.

Querido lector, espero que borre de su mente la imagen del judío acosado y odiado por el mundo. En la actualidad, Occidente es prosemita, prosionista, antiárabe y antipalestino. Quizás no los ciudadanos, pero sin duda, sí los principales dirigentes mundiales. Para que se dejen de confundir términos, y tengamos unos gobernantes prosemitas, antisionistas y propalestinos, es precisa la presión desde abajo, empezando por usted y por mí. Que pase unas buenas vacaciones despreocupadas, y feliz café.

sábado, 26 de diciembre de 2009

En el portal de Belén...

Según la división de terreno establecida por las Naciones Unidas y aceptada internacionalmente desde 1967-salvo por el Estado de Israel-, la municipalidad de Belén se extiende por un área de 658 km cuadrados, desde la frontera oeste con Israel hasta el Mar Muerto. En esta zona viven 168.000 palestinos. La ciudad de Belén es un gran centro económico, formando parte del corredor del Sur, que integran además Al Quds -Jerusalen- y Ramalah, y donde se concentra el 35% de la actividad económica palestina.
Además, Belen es un lugar de peregrinaje, porque es allí donde la cultura popular cristiana supone que nació Jesucristo y por las celebraciones navideñas que tienen lugar en la basílica de la Natividad. Por primera vez en 2009 años de Cristianismo, existe una barrera física que impide ir entre Belén y Jerusalen, ya que Israel acaba de terminar la construcción del muro de la Zona norte, que separa ambas ciudades santas.

En la municipalidad de Belen, Israel ha erigido 32 barreras físicas que rodean la ciudad, incluidos puestos de control y bloqueos de carreteras que impiden la libertad de circulación de mercancías y personas. Asimismo, en este área hay 19 asentamientos israelís y 16 puestos puestos de avanzada, en los que viven un total de 86.000 colonos. Tan sólo el 13 por ciento de las tierras comprendidas en la gobernación de Belén se encuentra bajo control palestino.

En febrero de 2009, Israel declaró unilateralmente que 1.700 dunums (1 dunum=1.000 metros cuadrados) de tierras pertenecientes a la aldea palestina de Artas, al sur de Belén, pasaban a ser "tierras estatales" destinadas a la expansión futura del asentamiento de Efrata.

Los principales asentamientos de la municipalidad, tales como Har Homa, Betar Illit, Efrat, Geva'ot y Bat'Ayin, tienen planes de expansión que pronto se llevarán a cabo. De la misma forma existen planes para construir un nuevo asentamiento llamado Gi'vat Yael en la zona de Al Walaja.

Mientras el mundo mira para otro lado, Israel va acercándose más y más a su objetivo de hacerse con el control total de la turística y rentable ciudad de Belén. En la actualidad acaba de completar el cerco mediante asentamientos y checkpoints. Ahora toca expandirse y ahogar a la población palestina, para que muera de hambre y sed.

Entonces, los palestinos más decididos, viendo que sus padres van muriendo de inanición, cogerán las armas y se inmolarán ante los soldados israelís. Esta será la excusa perfecta y definitiva para que el ejército israelí entre en la ciudad, hasta la mismísima Basílica de la Natividad. Luego establecerá un puesto de control permanente en el centro urbano. Más tarde lo dividirá en dos partes, una palestina y otra israelí, y luego le irá comiendo terreno a la zona palestina. Comenzarán las demoliciones de casas palestinas, a la par que vendrán nuevos colonos a instalarse en el centro de la ciudad de Belén. Los palestinos más peleones seguirán resistiendo, y el resto emigrarán a otras ciudades. Los antiguos palestinos que vivían allí pasarán a ser llamados "terroristas" o "animales que no saben convivir en paz", y serán expulsados de la ciudad.

En definitiva, de aquí a 10-15 años, Belén será una ciudad israelí, y el mundo entero se someterá a la política de hechos consumados de Israel sin rechistar. Ni siquiera El Vaticano parece dar señales de vida ante la política israelí de aislar los lugares santos del Cristianismo.

Querido lector, feliz Navidad. Cante usted muchos villancicos, y piense en el Belén de hace 2009 años, que seguro que aunque había persecuciones de niños, no era tan trágico como el actual. Y tras unas buenas comilonas navideñas, disfrute de su café.

martes, 22 de diciembre de 2009

No podemos olvidar

El período festivo que se abre hoy con el sorteo de la lotería, y que durará hasta el 6 de enero, no puede hacernos olvidar que hoy, como todos los días, habrá miles de palestinos que no podrán reencontrarse con sus familias porque se darán de frente con el muro que Israel ha construido en el Estado Palestino o que quedarán atrpados en algunos de los numerosos checkpoints israelís que hay a la salida de las ciudades palestinas. Feliz café.

lunes, 21 de diciembre de 2009

Mujeres por la paz y el fin de la ocupación

Como cada año, hoy ha partido la Plataforma de Mujeres Artistas para Palestina a repartir alegría por las calles. Cantarán por la paz en Oriente Medio, en ciudades como Jericó, Ramallah, Jenin y Belén, y aprovecharán el viaje para entregar a Palestina el dinero que obtuvieron con el Concierto "Gaza en el corazón", que dieron en Madrid el pasado 27 de febrero. En concreto, los beneficios se destinarán a la reconstrucción y mantenimiento de los hospitales de Gaza, que fueron bombardeados y destruidos por Israel durante el genocidio de diciembre de 2009.
Durante su estancia, se reunirán con Mahmud Abbas y otros altos cargos del Gobierno Palestino, así como con ONGs de Israel, tratando de crear vínculos entre las dos sociedades y aportar su granito de arena a la lucha por el fin de la ocupación israelí.

Esperemos que este año las bombas de Israel no alteren sus planes, y que estas valientes mujeres españolas, que dejan el calor navideño de sus hogares para recorrerse Palestina arrancando sonrisas a los niños y rompiendo la monotonía de sufrimiento de los mayores, puedan completar su ruta sin altercados.

Desde este blog, quiero acompañar anímicamente a la comitiva, compartir públicamente mi admiración por ellas, deseando poder estar allí, recorriendo de nuevo las calles palestinas, disfrutando de la hospitalidad y generosidad de sus gentes, y tratando de hacer que por unos instantes olviden que al salir de su casa, se encontrarán con un muro que les separa de sus seres queridos. En definitiva, hacer que por un momento, las explosiones que se oyen afuera a cada rato, dejen de ser de ser en las mentes de los niños disparos de soldados israelís a civiles palestinos, y se conviertan en los fuegos artificiales que exigiría el ambiente festivo que estas mujeres tratan de crear.

Querido lector, ni se le ocurra unirse el año que viene a las mujeres artistas. Es arriesgado, se perdería el discurso de Nochebuena del rey y le causaría toda una serie de inconvenientes que usted no merece. Tampoco vaya a ninguno de sus próximos conciertos que dén en España. Ya sabe las aglomeraciones de gente que se forman en estos actos, y además tendría que lidiar con el frío nocturno. Mejor relájese, déjese llevar por el ambiente festivo, ya que aquí no hace falta que nadie nos lo traiga, y disfrute de su café.

sábado, 19 de diciembre de 2009

Marwan Barghuti es la esperanza

Ante la imposibilidad de encontrar un sustituto que abandere la causa palestina, la OLP se ha visto obligada a renovar a Mahmud Abbas por otros 6 meses como líder de Palestina, y de momento quedan en suspenso las elecciones que supuestamente deberían de haberse celebrado en enero de 2010. Las elecciones anteriores, de enero de 2006, supusieron una gran victoria para Hamás, y desencadenaron el bloqueo internacional a Palestina. En definitiva, fueron una prueba más de que el mundo occidental sólo es demócrata cuando gana la candidatura a la que apoyan económicamente y la que mejor protegerá los intereses europeos y estadounidenses.

Tras la decepción de 2006, en la que no se dejó gobernar a Hamás, ya que Israel detuvo reiteradamente a los ministros que iban nombrando, la formación islámica no reconoce ahora a Mahmud Abbas como líder legítimo y no parece muy predispuesta a alcanzar con él acuerdo alguno. Es necesario un nuevo líder palestino que sepa reconciliar a las diferentes facciones más o menos religiosas, y que defienda con firmeza al Estado Palestino en los foros internacionales, en lugar de corromperse por la comodidad de los hoteles y restaurantes occidentales.

La persona indicada es Marwan Barghuti. Pertenece a una facción del Al Fatah que se muestra disconforme con la política de parálisis que están llevando a cabo los actuales líderes, como Abbas, y que busca la unidad de todas las facciones palestinas. Barghuti tuvo un papel destacado en la primera y segunda Intifada, así como en las negociaciones para la reconciliación entre Hamás y Al Fatah. Cuenta con altos índices de popularidad entre la población palestina y sería el presidente de conciliación que necesita el Estado Palestino. Sólo hay un escollo que salvar: Barghuti fue detenido ilegalmente -es decir, SECUESTRADO- en el año 2002 por Israel y aún está en la cárcel. En Palestina han tenido lugar decenas de campañas de ciudadanos de todas las tendencias, denunciando la ilegalidad del encarcelamiento y reclamando la inmediata liberación de Barghuti, pero de momento no han dado resultado.
No importa que Israel no tenga soberanía para juzgarlo y que exija a España que limite su jurisdicción universal. Como puede observarse, la jurisdicción universal sólo es condenada cuando se ejerce contra Israel, pero nunca si eso permite encarcelar a ciudadanos de otros pueblos, como Barghuti.

Lejos de ser un radical o un terrorista, Barghuti es un firme defensor de la liberación de Palestina y de la convivencia con Israel. Su pensamiento queda reflejado perfectamente en estas declaraciones que recoge el Washington Post: "A la par que me opongo fuertemente a los ataques a civiles en Israel, nuestro futuro vecino, me reservo el derecho a protegerme para resistir a la ocupación israelí de mi país y para luchar por mi libertad" "No soy un terrorista, pero tampoco un pacifista. Simplemente soy una persona normal de la calle palestina, que defiende todo lo que ha defendido siempre cualquier persona oprimida: el derecho a ayudarme a mí mismo, ya que no tengo ayuda de nadie más".

Hoy aparece en algunos periódicos la noticia de que Alemania está mediando en las negociaciones entre Israel y Palestina para que se libere a Marwan Barghuti a cambio de Gilad Shalit, en el plazo de dos o tres semanas. De producirse este hecho, Abbas podría tener al fin un sustituto aceptado por todas las facciones de Al Fatah y por la propia Hamás, que negociase en nombre de todos los palestinos con Barack Obama y la Unión Europea, para que por fin Palestina pueda acudir a la ONU a solicitar su entrada en la organización como miembro de pleno derecho.

Querido lector, no olvide el nombre de Barghuti, pues puede ser la llave que abra las puertas de la paz y el fin de la ocupación. Para ello hemos de apoyar la campaña para que termine su secuestro y sea liberado, así como presionar en Europa para que la causa palestina no caiga en el olvido. Sin embargo, también hay que preocuparse por comprar los regalos navideños, que es más importante. Mejor olvídese de los problemas de Oriente Medio, que son muy complejos y de difícil solución, y disfrute del café.

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Orden de detención contra Livni

Un tribunal londinense ha dictado una orden de detención contra la criminal internacional, Tzipi Livni, una de las autoras intelectuales e inductoras de la masacre de palestinos cometida en la franja de Gaza hace ya un año, en la que murieron 1400 palestinos, la mayoría de ellos civiles. Con motivo de esta orden, y para zafarse de la justicia, la ex Ministra de Exteriores de Israel ha tenido que cancelar su visita a Londres con motivo de una charla que iba a dar en el Foro Nacional Judío de la capital británica.
Tras la medida de las etiquetas anunciada la semana pasada, Inglaterra vuelve a dar muestras de que algo está cambiando y de que los crímenes de guerra de Israel causan un rechazo cada vez mayor. La hipoteca moral del Holocausto se está acabando, y ahora Israel va a tener que ganarse a la comunidad internacional con sus actos, y no promocionando los asentamientos y masacrando palestinos.

Cómo no, la diplomacia israelí ya ha declarado que esta orden supone un claro obstáculo para la paz en la región y ha condenado enérgicamente la supuesta injerencia británica en los asuntos de su país. Cabe preguntarse de qué tipo de paz hablan quienes no dudan en masacrar a 1400 personas en pocos días y sin motivo alguno. Es evidente que a Israel le va a costar acomodarse a la nueva situación en la que ya no tiene carta blanca para violar las normas internacionales una y otra vez.

Esperemos que el Gobierno británico no ceda a las presiones de los hombres de negocios de la city y de los magnates israelís, y que se respete la independencia del poder judicial, para que una criminal de guerra como Livni no pueda pisar Inglaterra sin temor a ser arrestada.

En cualquier caso, es en estos momentos cuando más duele la lamentable decisión de nuestros políticos españoles de suprimir la jurisdicción universal. Es necesario que ningún criminal de guerra pueda pasearse por Europa libremente dando conferencias y asistiendo a fiestas como si nada hubiera hecho.

Querido lector, deberíamos movilizarnos todos para que España reconozca la existencia del Estado Palestino, obligue a que los productos de las colonias lleven una etiqueta informativa de su procedencia y para que algún juez español abra una causa contra quienes asesinan palestinos por el mero hecho de ser diferentes. Es necesario que no puedan salir de Israel sin miedo a ser arrestados y que se vean presionados a cambiar sus políticas de imposición del terror. Sin embargo, se acercan ya el solsticio de invierno y las vacaciones, y seguro que usted no puede preocuparse por estas movidas lejanas, ya tiene que pensar en los regalos, en los dulces, y calentarse con un café caliente.

domingo, 13 de diciembre de 2009

Etiquetas

El Ministerio de Medio Ambiente del Reino Unido acaba de ordenar que los productos elaborados en asentamientos israelís, no puedan seguir llevando el etiquetado de "Made in Israel", sino que ahora deberá decir, "Producto procedente de un asentamiento israelí". Por supuesto, lo necesario sería que se prohibiera la entrada de productos elaborados en asentamientos ilegales en toda la UE, pero al menos este es un paso en la dirección correcta.

Nada más conocer la medida inglesa, los diplomáticos y portavoces israelís se echaron las manos a la cabeza, diciendo que esto era una clara prueba de que el mundo está en su contra.

Sin embargo, la nueva medida de etiquetado, lo único que hace es proporcionar al consumidor la información necesaria para saber que ese producto ha sido producido por una comunidad de colonos violentos, que se dedican a expropiar ilegalmente tierras a sus vecinos invocando para ello la Biblia. De esta forma, quien lo desee podrá dejar de legitimar económicamente la ocupación israelí.

De momento, no parece que en España se haya hecho ningún avance en ese sentido. Es lamentable que no se nos dé la oportunidad de formarnos una opinión en base a la cual poder decidir. Israel desea fervientemente ocultar estos datos. No sólo da trato preferente a los colonos, les asfalta las colinas para que las ocupen y les pone soldados para que los protejan, sino que además moviliza a su diplomacia para defenderlos. En definitiva, que el Estado de Israel es tan culpable como los propios colonos extremistas, y hasta que su actitud no cese, merece igualmente que no compremos sus productos.

A continuación se incluye una lista de las marcas que se han destacado por su apoyo a Israel, y que tienen fábricas o incluso su centro de negocios en Israel:
Querido lector, si usted compra algún producto de estas marcas, estará legitimando la ocupación de Israel y el sufrimiento del pueblo palestino. Sólo si los colonos encuentran problemas para comercializar sus productos, e Israel ve que el mundo quiere que deje de ser el país que más violanciones del derecho internacional comete, puede que comiencen a cambiar su modo de actuar. Los ciudadanos de todo el mundo tenemos la oportunidad de impulsar el cese de la ocupación ilegal. Pero usted, querido lector, queda exento de preocuparse. Sé que la lista de marcas es muy larga, y que el consumo responsable es costoso, pues implicaría dejar de beber Coca Cola y de comprar productos de Nestlé, entre otros. En definitiva, olvídese de estas menudencias y disfruté de su Nescafé.

martes, 8 de diciembre de 2009

El Plan Sueco

La Presidencia de la Unión Europea, que corresponde actualmente a Suecia, acaba de proponer al Consejo de la UE un plan para solucionar el conflicto palestino. En él se recoge por fin la realidad: Al Quds, es decir, Jerusalen Este, pertenece íntegramente al Estado Palestino, por mucho que Israel esté interesado en colonizarlo, cuasando terror en la población local y destruyendo sus casas para que los colonos puedan establecerse en esos solares.

Además, en el punto dos (pulsa aquí para ver toda la resolución), se dice que la Unión Europea no reconocerá ningún cambio territorial acaecido después de 1967, es decir, que se constata que todos los colonos israelís son personas que residen ilegalmente en el territorio de otro Estado. Asimismo, la Unión Europea afirma su compromiso de que Palestina pueda ser un Estado de pleno derecho reconocido por una mayoría de países del mundo.

Las decenas de iniciativas como esta que no han pasado de ser papel mojado invitan a la prudencia y al pesimismo. Hemos visto demasiados documentos y planes para la paz, pero ningún hecho en esa dirección. Israel ya ha condenado en plan sueco y está movilizando a todo su aparato diplomático y a sus lobbys para evitar que esta iniciativa no sea aprobada en el Consejo de la UE. Seguramente, países como Francia o Alemania se mostrarán reticentes a esta iniciativa, y quizás el texto final quede algo matizado y pierda su verdadera fuerza.

Sin embargo, la actual situación internacional deja también resquicios a la esperanza. El Estado de Israel ha alcanzado unas cotas de violencia sin precedentes, y sus vulneraciones del derecho internacional son cada vez más grandes. Miles de casas palestinas destruidas y centenares de colonos más viviendo en Palestina han hecho que Israel se gane el rechazo cada vez mayor de la comunidad internacional. El Holocausto es algo ya lejano, que ya no les sirve como instrumento para "enternecer" a la opinión pública internacional. Además, Obama podría por fin ir al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y que su país no ejerza de nuevo su derecho de veto cuando se vote la propuesta de admisión del Estado Palestino.

Por todo esto, es tan importante que desde el 1 de enero de 2010, la Presidencia Europea española coja el testigo sueco y se afane en que en el primer semestre del año se logren serios avances para la paz en Oriente Medio y el fin de la ocupación israelí. Es el momento de que José Luis Rodríguez Zapatero y Miguel Ángel Moratinos demuestren al mundo la firmeza de su compromiso con los pueblos olvidados y oprimidos, como el palestino. Y para ello es de vital importancia que la opinión pública española tome conciencia de la histórica oportunidad que tenemos. Todos los partidos políticos y agentes de la sociedad civil española deben unir sus voces para gritar bien alto, que Palestina debe ser ya un Estado y que Israel ha de terminar su ocupación ilegal.

Querido lector, usted no hace falta que se comprometa con este tipo de cosas. No vaya a las jornadas por Palestina que se organizan el día 15 de diciembre en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, ni a ninguna de las manifestaciones que tendrán lugar en enero con motivo del primer aniversario del genocidio que Israel causó en Gaza. Tampoco firme ninguna petición de ONG´s para que Palestina sea un Estado. Mejor quédese en casa, relájese y disfrute del café.

jueves, 3 de diciembre de 2009

Diccionario de la ocupación

El lenguaje juega un papel clave en el problema palestino. La maquinaria publicitaria israelí ha sabido modular los términos de tal forma que parece un conflicto entre democracia judía y totalitarismo árabe, entre estado de derecho y banda terrorista. Es el momento de clarificar algunos términos:

* Antisemitismo: doctrina que desprecia la raza hebrea. Fue cobrando importancia a lo largo de la historia, y tuvo su culminación en las políticas de la Alemania nazi. El antisemitismo desprecia a todo hebreo, independientemente de su ideología, creencias, sexo o edad, tan sólo por el mero hecho de pertenecer a una raza determinada. Por lo tanto, el antisemitismo es una variable del racismo y la xenofobia, que debe ser condenada por todo aquel que se encuentre en su sano juicio, y que hoy sólo es sostenida en España por los nostálgicos del franquismo.

* Antisionismo: el sionismo, según la RAE, es la aspiración de los judíos a recobrar Palestina como patria, así como el movimiento internacional de los judíos para lograr esta aspiración. El visionario del sionismo moderno fue Theodor Herzl, quien dudaba entre crear el Estado de Israel en Uganda, Argentina o Palestina. El gran problema del sionismo es que pretende que un pueblo se establezca donde ya hay otro viviendo, y por lo tanto, supone implícitamente la expulsión del diferente. En nombre del sionismo se han cometido cientos de violaciones del derecho internacional y se han asesinado a miles de palestinos. El sionismo es la ideología subyacente a la ocupación de Palestina; no tiene nada que ver con el semitismo, que sería la mera pertenencia a la raza hebrea. El antisionista no rechaza a todos los judíos del mundo, sino que está en contra de que un pueblo, en este caso el israelí, ocupe ilegalmente y por la fuerza un territorio que no le pertenece.

* Genocidio: es el exterminio o eliminación sistemática de un grupo social, por motivos de raza, etnia, religión, política o nacionalidad. A lo largo de la Historia, ha habido muchos, desde el de los hugonotes en la noche de San Bartolomé, en Francia, el Holocausto, el armenio o el ruandés, al del pueblo palestino, que lleva 60 años sufriendo discriminación, violencia y apartheid.

* Ocupación: situación en la que actualmente se encuentra el Estado Palestino. Hay quienes consideran que Israel no tiene derecho a ningún territorio de Palestina, ya que se asentó allí por la fuerza, mientras que la postura mayoritaria llamaría ocupación a la presencia israelí de colonos y tropas más allá de las fronteras previas a la guerra de 1967.

* Teocracia: es aquel régimen político altamente influido por los poderes religiosos, y donde hay una clara identificación del poder político con una determinada religión. En la Ley de Retorno de Israel se otorga la nacionalidad israelí a todo aquel que profese la religión judía, lo que supone una clara discriminación en favor de una religión.
Los rabinos son escuchados por los políticos, y las leyes religiosas se convierten en derecho positivo y normas sociales, y como muestra, no hay más que observar la paralización del país los sábados. Por lo tanto, al igual que Irán o Arabia Saudí, Israel también es una teocracia.

* Terrorista: el aquel que impone la dominación medio del terror. Es susceptible de ser incluido en esta categoría conceptual, no sólo una persona, sino por supuesto, una banda armada o una organización más desarrollada, como un Estado. Por lo tanto, los colonos israelís, como Barruch Goldstein, son terroristas, al igual que lo es un estado que no duda en emplear la violencia contra los palestinos para perpetuar la ocupación. Cuando vuelva a hablarse de "lucha contra el terrorismo", si queremos ser justos, debería incluirse en esa agenda la lucha contra los colonos y contra el Estado de Israel.

Querido lector, no se moleste en conocer el verdadero significado de las palabras que los periódicos emplean a diario. Es más fácil seguir creyendo que hay buenos y malos, demócratas y terroristas...Continúe con su vivir acrítico y así le resultará más dulce el café

martes, 1 de diciembre de 2009

Licencia para matar

En el reciente libro "El pentateuco del rey" (Torat ha-Melej), compilación de fragmentos de la Biblia y el Talmud, comentados por dos célebres rabinos, "se justifica que un judío mate a los gentiles (no judíos) si sospechan que cuando crezcan serán malvados." Se permite causar un daño a los no judíos si es para evitar la maldad. Asimismo, se afirma que la vida de un judío es mucho más valiosa que la de alguien de cualquier otra raza.


Este tratado religioso ha sido escrito por dos rabinos, profesores de escuelas religiosas, uno en una colonia ilegal cerca de Nablús y el otro en Merkaz ha-Rav. Sus centros de enseñanza reciben generosas ayudas públicas y gozan de un programa de becas para quienes decidan estudiar allí, sin importar que se encuentren en un territorio que pertenece a otro Estado, el Palestino.

Lo que aquí vemos no es otra cosa que la doctrina de la "guerra preventiva" que en su día promovió George W. Bush y que ahora en Israel ha sido disfrazada con tintes religiosos. Su tesis principal es: mejor matarlos a todos ahora, antes de que uno de ellos pueda convertirse en terroristas.

Para la paz, lo esencial es la educación. Si los niños de Israel crecen bajo las enseñanzas de quienes abogan por matar al contrario por no pertenecer a la misma raza que uno mismo, la ocupación y la violencia persistirán. Si el odio es inyectado tan pronto, los hijos de los colonos serán aún más radicales y agresivos. Por eso, y por el cumplimiento de la declaración universal de derechos humanos, es preciso que el Estado israelí retire todas las ayudas públicas a estas escuelas, y si no lo hace, que se establezca un bloqueo internacional sobre Israel. Obama no puede seguir subvencionando este tipo de escuelas de racismo y odio.

Querido lector, quizás le interese saber que el libro salió a la venta por unos 5 euros al cambio, y se agotó en breves instantes. La sociedad israelí, por tanto, respalda las palabras de los rabinos más radicales. Dentro de Israel puede haber resistencia a la ocupación, pero no soluciones. Sin medidas internacionales, no habrá paz. De todos nosotros depende. Usted disfrute del café.